jueves, 27 de febrero de 2020

Nace el día (Hugo Mujica)

 Nace el día
bajo un cielo despejado,

          la claridad en la que todo
          se muestra,
          lo que hacia ella brota
                                  y lo que su misma luz marchita.

Todo nacer pide desnudez
                                  como la pide el amor,
                                             como la regala la muerte.

“Mirando caer las lluvias, antología poética” (2013) 

jueves, 20 de febrero de 2020

El muerto (José Hierro)

Aquel que ha sentido una vez en sus manos temblar la alegría
no podrá morir nunca.

Yo lo veo muy claro en mi noche completa.
Me costó muchos siglos de muerte poder comprenderlo,
muchos siglos de olvido y de sombra constante,
muchos siglos de darle mi cuerpo extinguido
a la hierba que encima de mí balancea su fresca verdura.
Ahora el aire, allá arriba, más alto que el suelo que pisan los vivos,
será azul. Temblará estremecido, rompiéndose,
desgarrado su vidrio oloroso por claras campanas,
por el curvo volar de los gorriones,
por las flores doradas y blancas de esencias frutales.
(Yo una vez hice un ramo con ellas.
Puede ser que después arrojara las flores al agua,
puede ser que le diera las flores a un niño pequeño,
que llenara de flores alguna cabeza que ya no recuerdo,
que a mi madre llevara las flores:
yo quería poner primavera en sus manos.)

¡Será ya primavera allá arriba!
Pero yo que he sentido una vez en mis manos temblar la alegría
no podré morir nunca.
Pero yo que he tocado una vez las agudas agujas del pino
no podré morir nunca.
Morirán los que nunca jamás sorprendieron
aquel vago pasar de la loca alegría.
Pero yo que he tenido su tibia hermosura en mis manos
no podré morir nunca.

Aunque muera mi cuerpo, y no quede memoria de mí.


"Alegría" (1947)

jueves, 13 de febrero de 2020

La Tierra (Blas de Otero)



Un mundo como un árbol desgajado.
Una generación desarraigada.
Unos hombres sin más destino que
apuntalar las ruinas.
                                          Romper el mar
en el mar, como un himen inmenso,
mecen los árboles el silencio verde,
las estrellas crepitan, yo las oigo.
Sólo el hombre está solo. Es que se sabe
vivo y mortal. Es que se siente huir
—ese río del tiempo hacia la muerte—.
Es que quiere quedar. Seguir siguiendo,
subir, a contramuerte, hasta lo eterno.
Le da miedo mirar. Cierra los ojos
para dormir el sueño de los vivos.
Pero la muerte, desde dentro, ve.
Pero la muerte, desde dentro, vela.
Pero la muerte, desde dentro, mata.
...El mar —la mar—, como un himen inmenso,
los árboles moviendo el verde aire,
la nieve en llamas de la luz en vilo...

"Ángel fieramente humano" (1950) 

jueves, 6 de febrero de 2020

Significados (Eliseo Diego)

Qué significa oler, a qué lenguaje 
pertenece el picor de la cebolla 
siempre aludiendo a más; y la fragancia 
de amanecer de toda fruta, qué 
misteriosa promesa nos esconde 
que no agota el sabor; y qué nos dice 
el coro en pleno del café magnífico 
tronando en la tiniebla; y la ternura 
con que se acerca al corazón la rosa. 
Qué consuelo nos trae, de qué amor habla 
la picuala en aromas anhelantes; 
y si la humilde hierba nos bendice 
con su aliento final, por qué nos odian 
los lívidos desechos, acosándonos 
con sórdidos hedores, con nefastos 
halagos de terror. ¿Huele el abismo 
de la noche a vacío? La remota 
flor en ascuas que irrumpe en la negrura 
total de lo exterior, con qué perfume 
de vértigos nos llama. Pero aquí, 
sobre el mantel, en el silencio blanco 
de sus fibras sagradas, una voz 
con suave terquedad está insistiendo, 
desde la entraña cándida del pan, 
que no hay por qué, ni puede haberlo, 
que todo, todo al fin está muy bien.

"Poesía y prosa selectas" (1991)